“Lo Comprendo por Primera Vez” – ‘Quiero que sepan, hermanos, que el evangelio que yo predico no es invención humana. No lo recibí ni lo aprendí de ningún ser humano, sino que me llegó por revelación de Jesucristo. Gálatas 1:11-12, NVI.’
Jia-Yang An, traductor en Corea del Sur, se alegró de un acontecimiento histórico: Después de trece años el flamante Nuevo Testamento traducido al guajatique estaba terminado. Para ayudar en la lectura de pruebas de las páginas tipografiadas reunió a seis hombres guajatiques: tres co-traductores y seis líderes, que representaban en total a siete denominaciones diferentes. La meta era que todas las iglesias consideren suyo el Nuevo Testamento. Antes de empezar su trabajo, Jia-Yang oró por unidad en el grupo y consagró a Dios el proyecto.
Conforme se imprimían las páginas tipografiadas, Ji-Yang dividió a los hombres en tres grupos para leer las galeradas: un co-traductor y dos líderes de iglesias por grupo. Durante una sesión de lectura de pruebas de Gálatas, uno de los líderes de la iglesia exclamó: “¡Paren! Por favor, ¿podemos leer esto de nuevo?”
Después de la segunda lectura, el pastor dijo: “Esto es muy claro en guajatique. ¡Lo comprendo por primera vez! Este pastor procedía de una iglesia en donde usaban solamente inglés y Biblias en inglés. Su congregación no había respaldado el trabajo de traducción, diciendo que no usarían el Nuevo Testamento en guajatique.
Dios contestó la oración del traductor que pedía unidad. Más tarde esa semana, después de leer más Escrituras traducidas, el pastor le confesó a Ji-Yang: “Estaba equivocado. La Biblia en nuestro propio idioma es mucho más comprensible que las Biblias en inglés o los idiomas oficiales. La usaremos en nuestra congregación!”